Diferentes tipos de camiones: las lonas
Queremos darte la bienvenida a este post sobre talleres para camiones en Salamanca en el que iremos contando algunos de los secretos y curiosidades de esta actividad. Para comenzar, hemos pensado que nada mejor que presentarte someramente los diferentes tipos de camiones que utilizamos para ello. La normativa sobre tráfico define un camión como un “vehículo con cuatro ruedas o más, concebido y construido para el transporte de mercancías, cuya cabina no está integrada en el resto de la carrocería”.
Como talleres para camiones en Salamanca en principio, podemos dividir los camiones utilizados en el transporte de mercancías en dos grandes grupos: Los camiones rígidos y los articulados. En los camiones rígidos, un único chasis soporta tanto el habitáculo de conducción, el motor y la caja en la que se introduce la carga. Por su parte los camiones articulados están compuestos de dos bloques bien diferentes: La cabeza tractora y el semirremolque. En este caso, una cabeza tractora puede arrastrar semirremolques de diferentes tipos (góndolas, frigoríficos…). A veces habrás visto por la carretera camiones compuestos de una cabeza tractora, un semirremolque y, tras éste, uno o más remolques también con carga, son los conocidos como trenes de carretera.
La mayor parte de los camiones, articulados o rígidos, dedicados al transporte de mercancías son conocidos dentro del gremio como lonas, sencillamente porque se emplean lonas montadas sobre un armazón para cubrir las paredes y techo del camión. La lona es un material mucho más ligero que cualquier otro que pudiéramos utilizar para tapar la carga, y cuando se trata de transportar, es importante destinar toda la capacidad del camión a la carga.
Existen muchos otros tipos de camiones (frigoríficos, bañeras, góndolas, cisternas…) de los que te iremos hablando en sucesivos artículos de este blog de Talleres Carro.